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6 de Junio del 2006
Estudiantes secundarios ocupan oficina de la Unesco en Santiago
Tras dialogar con la directora regional del organismo, la brasileña Ana
Luisa Machado, los manifestantes abandonaron pacíficamente el lugar.
Exigían que la agencia de Naciones Unidas interviniera en el conflicto.
[actualizada]
Una treintena de estudiantes secundarios del Liceo de Aplicación ocupó
la mañana de este martes la oficina regional de la Unesco en Santiago.
La acción obligó a suspender una reunión de la Asamblea de
Estudiantes Secundarios (ACES) en el liceo Manuel Barros Borgoño, donde
los jóvenes evaluaban el futuro de las movilizaciones.
Tras dialogar con la directora regional de la Unesco, la
brasileña Ana Luisa Machado, los manifestantes abandonaron
pacíficamente el lugar.
Gonzalo Cabrera, uno de los estudiantes que participó en la medida de
fuerza, pidió un pronunciamiento del organismo respecto a la situación
de la educación, y difundirlo a nivel mundial.
Agregó que también esperan que la Unesco emplace al ministro
de Educación, Martín Zilic, a solucionar los problemas, y que
participen en la anunciada reforma al sector.
Hasta la agencia de Naciones Unidas para la educación, ubicada
en Bilbao con Pedro de Valdivia, en la comuna de Providencia, también
llegó Juan Carlos Herrera, uno de los voceros secundarios.
"La toma de la Unesco apunta hacia el objetivo de recibir el
apoyo internacional de la entidad”, dijo Herrera, quien pese a
reconocer que desconocían la acción, entregó su pleno respaldo.
Unesco descarta poder fiscalizador
Machado explicó que los jóvenes le pidieron que la Unesco pueda
cooperar en resolver los problemas de la educación, y que garanticen
que los compromisos asumidos por el Gobierno se cumplan.
“Les comentamos que no somos fiscalizadores”, dijo la
funcionaria internacional, que de todas maneras dijo que estudiarán
cómo podían constatar el avance de las medidas.
La directora regional de la Unesco también resaltó que el
movimiento secundario cumplió un importante papel, pero ahora es
necesario abocarse en la materialización de las medidas.
“El movimiento cumplió su papel, puso la educación en la mesa
de conversación de todos, hay una conciencia de la calidad de la
educación es fundamental. Entonces, el movimiento ya cumplió su papel.
Ahora es necesario construir una educación de calidad”, puntualizó.
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